El Instituto de Cultura de Mazatlán presentó la noche de este jueves el más esperado evento del año: “La Gala Navideña”, una celebración en la que más de 200 bailarines, músicos, coristas y cantantes invitados, trajeron la magia de la navidad al Teatro Ángela Peralta en su primera función.

Al a travesar el lobby del máximo escenario artístico del puerto, el público fue recibido por un gigantesco pino de navidad lleno de adornos, regalos y luces para tomarse fotos en familia junto al amargado “Grinch” y los siempre sonrientes “Santa Claus” y  su esposa la “Sra. Claus”. Después de despedirse de estos entrañables personajes, el público ingresó al teatro para contemplarlo cubierto de foquitos y coronas navideñas en sus balcones.

Al igual que en otras ediciones, la “Gala Navideña” estuvo sostenida por la colaboración de la Camerata Mazatlán, dirigida por Percival Álvarez; el Coro Infantil de Cultura, dirigido por Mariela Angulo, y el Coro Ángela Peralta, del maestro Antonio González, quienes durante casi dos horas acompañaron a los talentosos cantantes Andrés Carrillo, Celia Gómez, Radha Murillo y Sarah Holcombe que brillaron junto a la estrella internacional Scott Coulter, de Estados Unidos.

Además de contar con un gran número de voces e instrumentos, la “Gala Navideña” presumió un emotivo repertorio de ballet centrado en canciones como “Sing a Christmas Carol” y “Merry Merry Christmas” por parte de los bailarines de nivel básico y nivel técnico de la Escuela Municipal de Ballet Clásico del Instituto de Cultura de Mazatlán, dirigida por la maestra Zoila Fernández.

Entre las 18 canciones navideñas que crearon una atmósfera de amor y reencuentro familiar, destacaron “A Wondrous Christmas” que juntó en el escenario a los siete vocalistas invitados, “Candy Man”, en la que Scott Coulter asombró a todos los presentes apareciendo en el escenario sobre un globo aerostático, y “Danza de las flautas”, una suite del clásico navideño por excelencia, “El Cascanueces”, de Piotr Ilich Tchaikovsky.

El escenario mostró distintas caras conforme las interpretaciones iban transcurriendo: el público fue recibido por una escenografía que mostraba un bosque nevado; después fue cambiada por esferas luminosas colgantes; más tarde aparecieron unas veladoras encendidas frente a los coros y un cielo estrellado en el fondo, y la última escena estuvo compuesta por un árbol de navidad gigante adornado con foquitos y adornos que estuvo complementada por una escenografía de caramelos navideños.

Casi a la mitad de la “Gala Navideña” se proyectó el video “Paseo en trineo” para que los tramoyeros prepararan el escenario para la segunda parte del espectáculo, que inició con un pequeño bloque de canciones navideñas en español: “Campana sobre campana”, “El niño de tambor” y “Peces en el Rio”.

En la interpretación de “Noche de Paz”, por Celia Gómez y José Miguel Valenzuela, los artistas del Instituto de Cultura de Mazatlán recrearon la escena del nacimiento de Jesús y la visita que recibió por parte de los tres reyes magos Melchor, Gaspar y Baltazar.

Por su parte, en la interpretación de “Jingle Bells”, un grupo de duendes bajaron a rapel por los balcones e hicieron de las suyas por todo el teatro.

En la recta fianl del espectáculo Scott Coulter brindó una soberbia interpretación de “It’s the most wonderful time of the year” y la Compañía de Ballet Clásico de Sinaloa, dirigida por Zoila Fernández y Guillermo Carrillo, cerró con broche de oro la noche con “Christmas Medley”, interpretada por Sarah Holcombe, Radha Murillo y Andrés Carrillo.

Al finalizar esta pieza el Teatro Ángela Peralta quedó cimbrado por un largo aplauso que no cesó hasta que los directores Zoila Fernández, Guillermo Carrillo, Percival Álvarez, Antonio González y Mariela Angulo se encontraron en el escenario y recibieron junto a sus agrupaciones y los solistas el reconocimiento por haber dado vida a una edición más de la “Gala Navideña”, el evento más esperado del año que en su función de este viernes, a las 20:00 horas, cerrará el Festival Cultural Mazatlán 2016.

Por si fuera poco, al salir del TAP, el público celebró su propia posada al disfrutar de deliciosos esquites, tamales de piña, ponche de frutas, buñuelos y churros para luego pegarle a la piñata y regresar a casa con una bolsita de dulces.